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Las crecientes preocupaciones sobre el cambio climático y la sostenibilidad han llevado a los gobiernos de todo el mundo a comprometerse con la emisión neta de carbono cero, la reducción de la deforestación y la promoción de cadenas de suministro sostenibles.

Una ruta clave para cumplir con esos compromisos es cómo los gobiernos hacen sus compras. La contratación pública representa alrededor del 15% del PIB mundial, uno de cada 3 dólares que gastan, sumando la enorme cantidad de 13 billones de dólares de gasto cada año. Las compras también representan el 15% de todas las emisiones de gases de efecto invernadero cada año: eso es siete veces más que toda la industria de la aviación.

Las compras gubernamentales también marcan la pauta para el entorno empresarial más amplio del país. Si se hace bien, ello puede ser una palanca para la innovación y el espíritu empresarial; Si se hace mal, será un freno para el progreso ambiental y social.

Los gobiernos recién están introduciendo contratación de manera sostenible y puede parecer desalentador saber por dónde empezar, desde incorporar el costo del ciclo de vida del producto hasta comprar más productos locales y sostenibles y obtener materiales de construcción más sostenibles para la infraestructura.

Esta guía es el resultado de más de 30 entrevistas con expertos de las autoridades nacionales de contratación y otras partes interesadas clave, a menudo en entornos de contratación menos tecnológicos y más desafiantes. Identificaron que el desafío clave era comenzar y tratar de leer cientos de páginas de complicados criterios de expertos para traducirlos en estrategias simples que se pueden probar e implementar rápidamente.

Nuestro objetivo es cerrar esa brecha, brindando una descripción general de alto nivel de los enfoques que ya están funcionando y los mejores recursos para implementarlos y escalarlos, en función de las necesidades clave de los usuarios que escuchamos de los profesionales de primera línea.

Los profesionales se dan cuenta de que necesitan comprar cosas de una manera fundamentalmente diferente para cumplir con la contratación sostenible. Para hacer eso, nos dijeron que necesitan involucrar mejor a las partes interesadas tanto del sector privado como de la sociedad civil para comprender qué soluciones están disponibles. También identificaron la necesidad de una mejor información y datos en las compras del gobierno, tanto para comprender qué se compra como cuáles son los resultados ambientales y sociales de ese gasto. Estos son vacíos en la orientación actual y no son cosas en las que tradicionalmente, los enfoques predominantemente legales y centrados en el cumplimiento en adquisiciones se han centrado.

Afortunadamente podemos ayudar.